Qué es una almazara: origen, funciones y curiosidades

Sabes que el aceite de oliva virgen extra es buenísimo. Sabes que se hace con aceitunas. Pero… ¿tienes claro qué pasa entre el olivo y la botella? Aquí entra en escena un lugar con nombre raro y mucho protagonismo: la almazara. Hoy te contamos qué es una almazara, qué se cuece dentro (bueno, mejor dicho, qué se extrae) y por qué influye tanto en lo que pones en tu tostada.

Spoiler: si te gusta el buen aceite, te va a interesar saber esto.

Almazara: qué es y para qué sirve

Vamos al grano. Una almazara es el sitio donde se transforma la aceituna en aceite. Ni más ni menos. El nombre viene del árabe al-maʿṣára, que significa “lugar donde se exprime”. Tiene lógica: aquí es donde las aceitunas pasan de fruta a jugo.

Eso sí, no todas las almazaras trabajan igual ni con el mismo mimo. Y eso marca muchísimo la diferencia entre un aceite del montón y un AOVE que te hace cerrar los ojos al probarlo. Por eso, entender qué es una almazara de aceite no es un dato sin más: es la clave para valorar lo que comes.

Qué pasa dentro de una almazara

Ponte en situación: es otoño, los tractores van y vienen, el aire huele a aceituna fresca… y la almazara está a tope. El ambiente recuerda un poco a una fábrica, pero aquí no hay ni hornos ni aditivos. Solo técnica, tradición y mucho cuidado.

Vamos paso a paso:

Recogida y recepción de la aceituna

Todo empieza en el campo. Las aceitunas se recogen a mano, con vareo o con maquinaria según el tipo de explotación. ¿Y el momento ideal para hacerlo? Aquí te lo contamos: cuándo se recoge la aceituna.

Una vez llegan a la almazara, se pesan, se clasifican y se limpian. Se eliminan hojas, ramitas, tierra… Básicamente, se les da la bienvenida como se merecen antes de pasar al siguiente paso.

Molienda y extracción del aceite

Aquí empieza la magia. Las aceitunas se trituran hasta formar una pasta. Después, se bate suavemente (sí, como si fuera una masa) para que el aceite empiece a separarse.

La pasta se mete en una centrifugadora que gira a toda velocidad y separa el aceite del resto de componentes. Todo esto se hace en frío, es decir, sin calentar la pasta, para no alterar el sabor ni los nutrientes.

Almacenamiento y embotellado

Una vez obtenido, el aceite se guarda en depósitos de acero inoxidable, lejos de la luz y el oxígeno. Así se conserva su sabor, sus aromas y todas esas propiedades que lo hacen único. Cuando toca, se embotella. A veces filtrado, a veces no. Eso depende de cada productor.

Y si quieres probar aceites hechos con procesos como estos, pásate por nuestra tienda online de aceite de oliva virgen extra. Lo bueno no necesita artificios.

Tipos de almazaras: ¿todas son iguales?

Pues no. Igual que no todas las cocinas sacan los mismos platos, no todas las almazaras producen el mismo aceite. Aquí van los principales tipos:

Almazaras tradicionales y familiares

Pequeñas, cuidadas y muy personales. Aquí se mima cada detalle. El olivar, la molienda, el etiquetado… todo suele estar en manos de la misma familia o productor. Lo artesanal manda, pero siempre con un ojo puesto en la tecnología.

Cooperativas

Muy comunes en los pueblos. Varios agricultores se agrupan y llevan sus aceitunas a una misma almazara. La cooperativa una forma de compartir gastos y producir en conjunto, sin perder el control sobre el origen. Algunas cooperativas tienen tanta calidad como las marcas más punteras.

Almazaras industriales

Son gigantes. Procesan toneladas de aceitunas al día y usan equipos de última generación. Aquí prima la eficiencia, aunque eso no significa que el aceite sea peor. De hecho, muchas cuentan con laboratorios propios y gamas premium que cuidan cada paso del proceso.

Visitar una almazara: una forma de entender mejor el aceite

Si alguna vez tienes oportunidad de visitar una almazara en plena campaña, no lo dudes. Es como meterte en la cocina del mejor restaurante… pero en versión olivarera.

Ver cómo llegan las aceitunas, cómo se muelen, cómo fluye el aceite recién hecho… es un espectáculo. Además, muchas almazaras ofrecen visitas guiadas con cata incluida. Puedes oler, probar y aprender a diferenciar matices que en casa pasan desapercibidos.

Es una experiencia que engancha. Y no hace falta ser experto ni foodie para disfrutarla.

La almazara y el valor del AOVE

Aquí viene lo importante: lo que pasa en la almazara afecta —y mucho— al resultado final. Desde el tiempo que pasa entre la recogida y la molienda, hasta la temperatura, la limpieza de los equipos o el tipo de decantación. Todo cuenta.

Hay variedades, como el hojiblanco, que necesitan una extracción muy precisa para que sus aromas verdes, su frescor y su picor aparezcan en todo su esplendor. Si quieres saber cómo sabe este tipo de aceite, puedes echar un vistazo a nuestro aceite de oliva virgen extra hojiblanco.

Así que ya lo sabes: si un aceite te enamora, probablemente es porque en su almazara no han dejado nada al azar.

Saber qué es una almazara cambia tu forma de ver el aceite

Una almazara no es solo una fábrica. Es el alma del aceite. El lugar donde una aceituna recién cogida se convierte en ese oro líquido que da vida a tus platos.

Ahora que ya sabes qué es una almazara de aceite, seguro que mirarás tu botella con otros ojos. Y si algún día visitas una, acabarás valorando todavía más lo que hay detrás de una simple cucharada de AOVE.

Desde ARODEN queremos que disfrutes el aceite sabiendo de dónde viene. Por eso no solo te lo ofrecemos, también te lo contamos.

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